Julio Cobos salió a ratificar ayer a través de sus voceros políticos que su partido, Consenso Federal (ConFe), se presentará el año próximo en la provincia de Buenos Aires, aunque Néstor Kirchner sea el candidato a diputado del oficialismo.
Por eso el cobismo empezó a preseleccionar nombre para competir en el principal distrito electoral del país: el intendente de Junín, Mario Meoni; Margarita Stolbizer, de la Coalición Cívica, y el peronista díscolo Felipe Solá son sus principales opciones.
Ayer, el jefe de los diputados cobistas, el bonaerense Daniel Katz, confirmó que « inexorablemente» confrontarán con el kirchnerismo en las elecciones legislativas de 2009. «Inexorablemente vamos a confrontar con el Frente para la Victoria; ya no somos lo mismo», aseguró Katz, principal operador del vicepresidente en la Cámara baja. Justamente Katz, ex intendente de Mar del Plata, es el nexo con Solá, quien ya dejó trascender que renunciará a la banca obtenida en 2007 por el oficialista Frente para la Victoria para volver a postularse con un sello PJ propio.
Pero Solá no es la primera opción de Cobos. En el despacho del vicepresidente en el Senado están atentos a la ambición presidencial del ex gobernador bonaerense y saben que de aliado en la provincia podría pasar a convertirse en rival directo para las elecciones presidenciales de 2011. De hecho, Solá ya admitió que le gustaría postularse para presidente, plan que choca con los de Cobos por suceder a Cristina de Kirchner dentro de tres años. Cobos planea una campaña 2009 con vocación frentista, aunque en la provincia de Buenos Aires tiene a Meoni como su prioridad.
El intendente de Junín fue uno de los líderes de la revuelta agropecuaria en la pelea contra las retenciones móviles y se adapta al perfil de dirigente afín al campo que busca el vicepresidente.En contra tiene el poco caudal de votos que podría arrastrar frente a figuras más mediáticas como Solá o Stolbizer y, en caso se ser el bendecido por el vicepresidente para encabezar la lista de diputados, Consenso Federal pondría a Cobos al frente de la campaña en ese distrito.
Ayer, Katz explicó que la «prioridad» de ConFe es «el fortalecimiento del espacio», aunque aseguró que éste mantiene el diálogo con distintos sectores como para establecer alianzas, de cara a las elecciones del próximo año. En este sentido, Cobos ya especula con la formación de un frente opositor que incluya a los diversos espacios políticos, similar al acuerdo que ya pusieron en marcha la UCR, la Coalición Cívica y el socialismo. Si Elisa Carrió acepta un acuerdo con el cobismo, las huestes del vicepresidente estarían dispuestas a apoyar la candidatura de Stolbizer a primera diputada por la provincia de Buenos Aires.
El principal obstáculo para el acuerdo Cobos-Carrió es el enfrentamiento abierto entre Stolbizer y sectores del alfonsinismo como Leopoldo Moreau, que también merodean al cobismo. Para esa construcción, Cobos imagina a ConFe junto a la UCR, al socialismo y a algunos sectores de la Coalición Cívica, sin dejar de lado a una pata peronista, pero prefiere mantenerse alejado del ex presidente Eduardo Duhalde. El kirchnerismo salió ayer a fustigar una vez más al vicepresidente, esta vez a través del jefe de los diputados oficialistas, Agustín Rossi. «Las calificaciones que ha recibido Cobos son las que corresponden a la acción que tomó. En lugar de representar al Ejecutivo representó lo que él creía. El vicepresidente en lugar de acortar las distancias, las fue alargando», embistió el santafesino. (ambitoweb)
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